"ESCUELAS DEL CALDO"

Ya hace unos días, en  un  medio de transporte público me ofrecieron gratuitamente un periódico: "La Opinión"
Lo acepté, me puse a leerlo y me gustó un artículo sobre las "Escuelas Populares Gratuitas" de La Coruña, conocidas en la ciudad también como "Escuelas del Caldo".

Me acordé de mis padres, porque en más de una ocasión les había oído hablar de ellas. Era muy joven y me hacía gracia esa expresión para referirse a ellas...¡porque no sabía lo que encerraban esas palabras!

Hace 125 años que se crearon para paliar la miseria en la que vivían muchos niños de nuestra ciudad, que en ese momento tenia 35.000 habitantes.

En 1887, D.Camilo Rodriguez -Losada y Ozores  (Coronel de Artilleria) propició la creación de estas escuelas.
Nacieron con la intención de cubrir la educación, alimentación e incluso la higiene de cientos de niños que no podían ser atendidos por sus padres ni en lo más básico, como es la comida.
No eran más de cinco niños cuando la primera escuela abrió sus puertas. Era una aula, cedida por una benefactora, en la calle "Herrerías" ( más tarde fue comprada por la Fundación). Pero el número de niños, desgraciadamente, se multiplicó enseguida y se abrieron más escuelas en otras zonas de la ciudad (Garás, Orzán...)
Lo más importante era cubrir la primera necesidad básica...¡la comida!
Hubo épocas en que la comida era más abundante que en otras, pero había siempre el plato principal, y muy nuestro...¡el caldo!, del cuál tomarían el nombre estos centros..."LAS ESCUELAS DEL CALDO"

A principios del S.XX se impartían clases nocturnas para adultos, llegando a estudiar más de 400 obreros.
En los años 60, el Estado se hace cargo de la Educación, por lo tanto se tienen que adaptar al nuevo modelo educativo y en 1967, la escuela de Herrerías, se convirtió en una guardería.

El sábado 25 de Mayo hubo una misa en la Iglesia de Santiago, seguida de una visita a la escuela y colocación de una placa dedicada por los antiguos alumnos.
Se quiso homenajear a los fundadores, antiguos alumnos y maestros de estas escuelas.

Hoy en día la Fundación se financia por varias vías. Los niños pagan, pero sólo los que pueden pagar o aportar algo.
José Luis Piñeyro (Presidente del Patronato de la Fundación) recuerda como hace años nadie podía pagar... "nada".
Recuerda también que fue toda una noticia de prensa que las escuelas abrieran un "aseo".
Reciben ayuda de los coruñeses y socios protectores que donan una cuota libremente. Cuentan también con el Banco de Alimentos.

Un antiguo alumno de estas escuelas (en los años años 50) y vecino de la Plaza de España en esa época, recuerda la calle donde vivía, Calle Cartuchos, llamada también "Calle de las Bombas" porque allí estaban los bomberos.
No utiliza el termino "profesor". Él dice que eran "maestros"...que es "otra cosa". Recuerda esa época sin tristeza, como algo bonito, tanto en lo académico como en lo lúdico.

Se acuerda de ese "caldo" y de los potajes que les ayudaban a "tener y reponer" la energía que es propia de unos niños.

Recuerda en concreto a un maestro... a D. Julio Ortega, que era además el Director del Coro.
Llegó a haber, también, una banda de música muy conocida.

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Los últimos alumnos (de los años sesenta) pidieron que la misa se celebrara en la Iglesia de Santiago, porque era la Iglesia a la que acudían cuándo estaban en la escuela.

                               
En estas escuelas, hasta los años 50, también había clases para niños ciegos, legado de un sacerdote que tenía esta escuela para niños ciegos en el "Campo de la Leña" y que deja dicho que tras su muerte esta escuela se anexione a las "Escuelas Populares Gratuitas". A finales de los 50 se crea un internado en Pontevedra para estos niños.

Estoy convencida de que hicieron una labor social muy importante, pero los ciudadanos (que somos el Estado), con un buen patriotismo, pagando "TODOS" Y "TODO"  lo que nos corresponde para la Hacienda Pública...estoy segura de que evitariamos estas situaciones sociales tan lamentables e injustas...sobre todo cuando se trata de la infancia...¡Los niños son sagrados!

Pero siempre, ante una ayuda y una buena intención..."Es de bien nacidos, ser agradecido"...eso me inculcaron.

Hasta muy pronto.